Testimonios

L'oservatorio Romano publicó sobre ella el 2 de agosto de 2002

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Mons. Alberto Tricarico, Nuncio Apostólico

Funeral María Teresa Botello Uribe 

Homilia del Mons. Tricarico, Nuncio Apostólico

El 30 de Julio de 2002 en Roma, Italia

"La Madre Ma. Teresa Botello ha llevado la palabra de la Iglesia a ustedes, al Instituto; y ustedes a su vez la han llevado a muchas almas en diversas como autenticas misioneras.

Ella ha hecho llegar a tantas, tantas personas el mensaje central de Jesús, la resurrección y la vida, la misericordia y el perdón, la conversión. Ciertamente no eran fáciles las circunstancias (en las que vivió la Madre) pero ella ha cumplido su misión, y en cierto modo, ella como el Señor Jesús muriendo en la cruz, ha podido decir: “todo se ha consumado”.

Nuestra confianza en este momento es grande, no sólo por la promesa del Señor, sino por la constancia de la Madre y fidelidad a su misión en la Iglesia.

Más allá de un tributo de afecto a este don de valor incalculable como es la oración de la fe, nosotros reconfirmamos nuestro empeño en el deber y fidelidad a nuestro instituto que debemos ser sobre todo Iglesia y reciban el abrazo del Santo Padre.

Las hermanas hoy confirman este compromiso. Damos este homenaje a la Madre General que ha seguido inmediatamente a la Madre Fundadora; yo sé –y ustedes mejor que yo-, con cuánto escrúpulo, con cuanto valor y dedicación ella ha tomado este mensaje y lo ha llevado todos estos años y todos los días de su vida."

+ Mons. Alberto Tricarico, Nuncio Apostólico (homilía de funeral 30/VII/2002)
(Misionera de Esperanza, testimonios varios, pag. 36)

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María Teresa Botello Uribe murió "en fama de Santidad" (Testimonio de Mons. Felipe Tejeda García, M.sp.S.)

Mons. Felipe Tejeda García, M.Sp. S

 En medio de la alegría de la quinta visita Pastoral a México de nuestro Santísimo Padre Juan Pablo II, nos hemos enterado con dolor del fallecimiento de la Reverendísima Madre MARÍA TERESA BOTELLO URIBE, segunda superiora general –la primera Sup. General fue la fundadora Beata María Inés- de tan querida congregación, ocurrido en fama de santidad el domingo 28 de julio del presente 2002 en la Ciudad Eterna.

Deseo expresarle la cercanía espiritual de esta Comisión Episcopal que presidimos, seguros de que la Madre María Teresa Botello ya ha tenido su encuentro definitivo con la Santísima Trinidad, pues vivió fielmente entregada para cumplir el “OPORTET ILLUM REGNARE”  de la Venerable Madre fundadora, Beata María Inés Teresa Arias Espinosa”

Testimonio de su Excelencia, Mons. Felipe Tejeda García, M.sp.S. Obispo Auxiliar de México, Presidente de la Comisión de Institutos de Vida Consagrada.
(Misionera de Esperanza, testimonios varios, pag. 36)
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Testimonio de Mons. Karel Kasteel sobre María Teresa Botello Uribe

Ha llegado el momento para la “Consolidadora”. La Madre María Inés es la fundadora, pero la segunda (María Teresa Botello) tiene que consolidar lo que la fundadora había hecho y lo hizo muy bien y lo hizo fantásticamente, porque no es fácil ser la sucesora de una fundadora. Porque la fundadora recibe el carisma, pero la segunda tiene que tratar  de mantener el carisma. Fue la guardiana del carisma y lo hizo muy bien. Ella lo ha sido de modo maravilloso, y por eso le tenemos que agradecer al Señor en esta santísima Eucaristía donde estamos celebrando ya, - que creo yo, se puede decir- su entrada al Paraíso. Yo creo que con todo lo que ha sufrido, pero también siempre con su sonrisa de modo tan heroico.

Así que,  gracias a Dios este Instituto de Misioneras Clarisas ha tendido la gracia de tener dos Madres de suprema responsabilidad, extraordinarias. No, no es un don de todos los días, más bien es un don raro y hay que vivir según ese don, según esa santidad. Ser un don, un espacio de salvación, ser espacio de santidad.

Madre María Teresa, mujer de gran sufrimiento, pero al mismo tiempo de consagración total, había comprendido este nuevo don a la Iglesia, del Espíritu Santo, que son las hermanas del Santísimo Sacramento, como casi, como si hubiera sido de ella también, (María Teresa Botello) es COFUNDADORA, la comprendió, había esa ósmosis total con la fundadora. Como es grande cuando Dios da esta gracia de estar tan unidas en el plan de Dios, en el camino de Dios.

No se olviden que cada una de ustedes debe ser como ellas. Agradezcámosle al Señor este don.  

Mons. Karel Kasteel, Secretario de la S.V.D "COR UNUM"

(Homilía,  29 de julio 2002)